El producto
La sintonizadora en sí, es algo mayor que una memoria USB. Sus medidas son de 10,8×3,3×1,2 cm. Su color es blanco y un gris muy agradable y actual.
El montaje es plug and play, conectando el stick a un puerto USB y la antena a su conector.
La estética de esta es sencilla y correcta, no desentonando en los diferentes entornos de utilización. El conector USB está protegido por un capuchón que lo defiende perfectamente y que sigue la línea del diseño, haciéndolo compacto y moderno.
Vemos la sintonizadora por delante…
Por detrás, desde donde vemos la toma de antena.
Y con el «capuchón» protector del conector USB quitado. Sería buena idea que permaneciera colgando una vez quitado, para evitar que se nos pueda perder.
Tiene tres conexiones diferenciadas en su superficie, el conector USB ya comentado, el conector del posible receptor de mando a distancia (no incluido) y el conector de antena.
Este conector es estándar, por lo que podemos utilizar un cable «normal» de antena para conectarlo, el mismo que nuestra TV de casa.
La antena portátil es de reducidas dimensiones, con un cableado de 1,18 metros de longitud. Su base es magnética, lo que permite fijarla a cualquier superficie metálica y así evitar que se mueva, facilitando la sintonización.
Esta antena nos permitirá, en zonas de buena cobertura, recepcionar los canales que deseemos.
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